Me encontré con este tema recientemente en el boletín The Daily Wellness, y como es tan aplicable a quienes intentamos sentirnos y sentirnos mejor en la vida, quería compartir parte de lo que leí, además de algunas reflexiones personales y un ejercicio que he usado durante años.
Aquí está el estudio:
En resumen: Al comparar la escritura de 36.000 personas, los investigadores descubrieron que cuando se usa una mayor variedad de palabras que describen emociones negativas en su lenguaje cotidiano (como “devastado”, “furioso”, “ansioso”, “estresado”), tienden a reportar un mayor nivel de depresión, ansiedad y peor salud física.
Por otro lado, quienes tenían mayor Granularidad Emocional (Lea mas aqui) con palabras que describen emociones positivas (como “emocionado”, “tranquilo”, “esperanzado”, “alegría”) mostraron un mejor bienestar general y salud mental.
😊 😀 😃
Aquí tienes un ejercicio que he usado durante muchos años y que muestra cómo nuestro cerebro se ve influenciado por las palabras que usamos:
Imagina un evento próximo que te pone nervioso. 😬 😟 😥
Puede ser una visita al médico, una presentación en el trabajo o la escuela, o una conversación difícil que necesitas tener. Observa cómo se siente tu cuerpo: tal vez tu corazón empiece a latir más rápido, tu respiración se vuelva más superficial o te sientas acalorado…
Ahora, respira hondo y dite a ti mismo: "¡Estoy tan EMOCIONADO por _____! ¡Tengo muchas ganas de ______!" 😀, y respira con esa emoción.
¿Cómo te sientes ahora? Quizás notes que, en lugar de agobiarte, las mariposas en el estómago te llenan de energía y te sientes más ligero. 🦋 Incluso podrías empezar a sentir un agradable cosquilleo o vibración en tu cuerpo. ¿No es mejor?
¡Nuestros cerebros realmente no distinguen entre sentirse "nervioso" y "emocionado"! Así que podemos DECIDIR cómo QUEREMOS sentirnos y usar las palabras adecuadas.
Prueba este ejercicio de atención plena hoy y cuéntame cómo te va:
Observa qué palabras usas hoy para describir cómo te sientes. Simplemente, obsérvalas sin juzgarlas. Puedes escribirlas y marcarlas cada vez que pienses o pronuncies la palabra.
Si parece que usas más palabras para describir emociones incómodas, quizás puedas intentar observar y concentrarte en las emociones más felices. Al principio, pueden durar solo una fracción de segundo, pero cuanto más las notes, más se entrenará tu cerebro para notarlas. 😊
Esta es una práctica para toda la vida, pero puedes empezar con este pequeño paso hoy y avanzar poco a poco. No hará que los desafíos de la vida desaparezcan, pero podría cambiar tu perspectiva.
Si, sin embargo, todavía te sientes atrapado en el ciclo de pensamientos, sentimientos o sensaciones corporales pesados, ¡ten en cuenta que tan solo una hora de Aroma Freedom puede ser un gran paso adelante para disolver esos lazos pegajosos! 🐸 ¿No me crees? Por favor, lea las experiencias de personas reales como usted en mi página web principal bajo el título “Testimonios”.
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¡Espero tener noticias tuyas!
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